Viernes, 18 de febrero de 2022
Hola Natalia. Una cosa es no tener idea de cuál puede ser una buena solución a un problema, y otra cosa diferente es no tener claridad sobre cómo llevar a cabo la solución. En general, el sentido común nos dice que, la solución ante un comportamiento violento, consiste en emprender alguna acción que limite y/o evite que vuelva a ocurrir. Cuando no se toman acciones para evitar que la agresión vuelva a suceder (o peor aún, que se vuelva más intensa), el mensaje indirecto que el agresor recibe es: este es un método que resulta útil para obligarte a hacer lo que yo quiero. En los casos donde existe violencia física NO es recomendable recurrir a una terapia de pareja. Por otro lado, "perdonar" a un agresor no significa asumir una actitud pasiva y dejar que la violencia siga ocurriendo. Las conductas violentas son un problema que requieren acciones concretas, muchas de ellas difíciles de implementar si no se cuenta con apoyo especializado, ya que es muy difícil que desaparezcan por sí solas. Esto se debe a que, sin darse cuenta, las personas involucradas en una dinámica agresiva quedan atrapadas en un círculo vicioso difícil de romper. Te sugiero busques psicoterapia individual donde puedas reflexionar sobre tu definición de perdón, las desventajas que ésta definición te puede estar generando, y para que logres encontrar estrategias que te permitan saber CÓMO ponerle un alto a la agresión de manera inmediata y salvaguardando el cariño que todavía exista entre ustedes. De igual forma, es importante que tu pareja esté de acuerdo en comprometerse a encontrar una forma alternativa de comunicar su frustración sin recurrir a la violencia (esto seguramente le implicará a él iniciar un proceso terapéutico también). Ojalá puedan atender esta situación lo antes posible.