Martes, 04 de abril de 2017
Es un torrente de emociones negativas que ni la persona más preparada (si se puede estar preparado) es capaz de asumirlo de entrada. La sensación que se tiene es de que tu mundo se desmorona y que no vas a ser capaz de superarlo.
Asumir la realidad:Lo primero que hay que hacer ante una infidelidad es asumir que ha sucedido. De nada vale regodearse el dolor y en la injusticia de lo sucedido.Lo primero que hay que tener claro cuál es la situación ante la que te estás enfrentando: Ha sido algo puntual, mantiene una doble relación, son habituales las infidelidades con varias personas,… no es cuestión de obsesionarse y buscar enemigos donde no los hay, pero es necesario conocer ante que situación nos estamos enfrentando.
Gestiona el dolor:Es básico comprender que acabas de descubrir una traición y lo normal es sentir dolor. Asume que te sucede y genera el tiempo y el espacio necesario para gestionarlo.Busca la ayuda de amigos y familiares y un lugar donde puedas “llorar tu pena” o “dejar salir tu rabia” rodeado de personas que te quieren y en un espacio de seguridad.Dedica el tiempo que necesites para gestionar este dolor, pero ten en cuenta que quedarse demasiado tiempo “lamiéndote la herida” tampoco te va a solucionar nada. Si quieres aprender como superar una infidelidad, ten en cuenta que el tiempo dedicado a “sentirte hecho una mierda” debe ser limitado.
Afrontar la situación:Tras superar el shock de descubrir que tu pareja te es infiel y dedicar un tiempo a asumir el dolor, llega el momento de afrontar la situación.A la pregunta de cómo superar una infidelidad, sólo hay dos opciones saludables:
Terminar la relación (separación)
Reconstruir la relación de pareja
El resto de alternativas, son totalmente autodestructivas. Por ejemplo seguir con la relación de pareja como si no hubiera pasado nada, sin iniciar un proceso de reconstrucción, es una garantía de infelicidad y de mayores problemas en el futuro.
La pregunta que hay que hacerse uno mismo no es “que debo hacer”. Las preguntas claves son:
¿Qué quiero hacer?
¿Qué soy capaz de hacer?
Asumen que cualquiera de las dos opciones (romper o reconstruir) van a ser duras y difíciles de llevar a cabo y que te vas a tener que esforzar mucho para lograrlo.
Decidir qué quieres hacer y ponerlo en práctica son dos cosas distintas.
Perdonar: es necesario para superar una infidelidad. Perdonar no quiere decir optar por seguir con la relación. Incluso cuando tu decisión sea dejar la relación, lo más saludable para ti mismo es ser capaz de perdonar a la persona que te ha hecho daño.
Poner en práctica la decisión que has tomado:Sin lugar a dudas, el paso más difícil de todos, el que más tiempo va a necesitar y para el que nunca estamos preparados.
En el caso de dejar la relación la relación los problemas a los que te enfrentas son más operativos (donde vivir, cómo actuar con los hijos, cómo repartir los bienes comunes,…).
En el caso de decidir seguir juntos, es necesario abrir un proceso de reconstrucción de la relación de pareja. Esta reconstrucción se tiene que basar en dos pilares claves y necesarios:
Que hay que cambiar/mejorar en la relación.
Recuperar la confianza y la normalidad.
Que hay que cambiar/mejorar en la relación
Porque una infidelidad no es el problema, sino el síntoma de algo que no estaba funcionando bien. Una infidelidad no sucede si todo funciona bien y será necesario revisar qué aspectos de la relación de pareja son disfuncionales para que haya acabado en esta situación.
El objetivo de revisar que funcionaba mal en la relación no es para buscar culpables ni expiar pecados, sino para una vez descubiertos los puntos débiles cambiar y mejorar la relación.