Viernes, 26 de time.september de 2014
Hola. Considero que la confianza no es una cuestión de TODO o NADA. Si tuvieras 1 millón de dólares y un extraño te los pidiera prestados... ¿se los darías? Probablemente no. El punto que quiero resaltar aquí es el siguiente: cuando una persona nos pide confiar en ella, nos está pidiendo que tomemos un riesgo. No tenemos la certeza de que lo que nos pide saldrá bien (si la tuviéramos no estaríamos hablando de confianza sino de fe). Si vas a prestarle 1 millón de dólares a alguien, seguramente será porque ya lo conoces y porque ese alguien ha saldado deudas menores en ocasiones anteriores cuando le has prestado dinero. Cuando trabajo con parejas que se han enfrentado a una infidelidad, la confianza es algo que se va recuperando poco a poco. Si te exiges a ti misma confiar al 100% sin haber trabajado en esto, puedes estar violando tus propios límites y llegarás a sentirte mal por eso. Hay una frase que dice: "la traición a uno mismo es finalmente traición, y es la más grave." ¿Se puede recuperar la confianza? Sí. Sin embargo, no te coloques en una situación donde tengas que escoger entre dos alternativas extremas y mutuamente excluyentes: volver a confiar ciegamente en tu esposo VS dar por terminada tu relación. Si lo ves desde ese punto, considero que no importa lo que escojas, creo que te quedará la sensación de que tuviste que renunciar a algo sin haber estado lista para dejarlo ir. ¿Puedes llegar a brincar un muro de 5 metros sin ayuda? Lo más seguro es que no. ¿Puedes llegar a subir por una escalera hasta el décimo piso de un edificio? Seguramente sí. Resumiendo, si ves la confianza como un asunto de todo o nada (podré brincar el muro o no lo podré brincar) te será más difícil. Si lo ves como una escalera donde irás subiendo un peldaño a la vez, seguramente incrementarás tus probabilidades de éxito. Suerte. Motivación, voluntad, actitud.