Martes, 16 de time.september de 2014
La ira o la rabia es una emoción humana normal y es la forma en que el subconsciente libera la tensión emocional y mental, pero a veces esta función psicológica normal puede quedar fuera de control y llevarnos por mal camino. Enfadarse es normal; dejar que la ira se lleve lo mejor de nosotros, no lo es. Durante la adolescencia es muy común sentirse abrumado por la intensidad de los sentimientos u opiniones, Pero cuando se tratan de sentimientos negativos, es muy importante saber manejarlos ¿Cómo saber si la ira está fuera de control? Se puede saber si tiene un problema para controlar la ira o la rabia si:
Tenemos la sensación casi permanentemente de tener la razón y nos sentimos muy molestos e irritados con todos aquellos que no lo ven así.
Nos enfadamos con cada inconveniente, con todo lo que nos molesta o se interpone en el camino de lo que queremos hacer.
Nos lleva a comportarnos con agresividad o violencia, como gritar, despotricar, dar golpes o empujones o desear venganza.
Nos consume mucho tiempo después de que el evento haya pasado; si insistimos en las cosas que nos molestan entonces tenemos un problema porque la ira normal sólo una respuesta emocional temporal a un constante estímulo desestabilizador.
Cosas que no solían molestarnos se vuelven de repente problemas importantes, dignas de una discusión; esto no se aplica a los momentos en los que hemos frenado la ira normal, sino sólo a los momentos en los que no hay realmente motivo para la ira, por ejemplo, cuando alguien obtiene mejor nota que nosotros o cuando una persona tarda demasiado en el baño.
Nos damos cuenta de que estamos haciendo cosas autodestructivas para hacer frente a nuestros sentimientos de enfado, como conducir de forma temeraria, realizar actividades de ocio peligrosas, pelearse, tomar drogas y alcohol o realizar prácticas sexuales de riesgo.