Miércoles, 13 de noviembre de 2013
Carola Navarrete Kelly
Psicología
Psicología
“Un minuto de silencio para escucharte en los latidos de mi corazón, un segundo de tu tiempo para encontrarme en el camino que nos separo. Amor a destiempo entre tú y yo.. ”. Anónimo
El tiempo tiene esa magia que todo lo hace real, puede fortalecer una relación, debilitarla, separarla o reencontrarla por siempre.
A diario escucho a hombres y mujeres que se resisten a soltar lo que a todas luces les hace mal. El miedo, compromisos o el sólo hecho de hablar los paraliza dejando de lado la importancia del tiempo en sus vidas.
Muchas veces hemos escuchado a nuestra abuelita decir “déjalo ir si vuelve es tuyo sino es porque nunca lo fue”. Aún cuando pudiésemos cuestionar la propiedad de sus palabras, tiene a su base lo único que no se puede controlar, el tiempo.
Para muchas personas el tiempo es oro, para otros un recurso escaso, para los que sufren una tortura y para quienes gozan de la vida un deseo de que esto nunca se detenga.
El corazón es una buena orientación en el paso del tiempo, logrando calmar el dolor y definir el curso de la relación. Después de una separación, distanciamiento o quiebre final, el tiempo es el principal aliado de la historia dando paso al perdón, olvido o a la confirmación que esto fue lo mejor para los dos.
Dele tiempo al tiempo, no se trata que sostenga su tristeza sobre falsas ilusiones, sino que logre darse un respiro para que sea el tiempo quien hable de su relación.
Si en verdad usted sigue amando sentirá la paz que el tiempo le da, logrando desde el silencio escuchar lo que dice su intuición. Insisto en que si en verdad usted amo, disfrutará de ver a la otra persona plena, feliz y finalmente mucho mejor que cuando estaban juntos.
Esa sabiduría y gozo en su alma sólo se lo entregará el paso del tiempo. Permítaselo no sólo por usted sino por los dos, dejando que sea este quien finalmente defina lo justo y adecuado para vuestras vidas.
Carola Navarrete Kelly, Psicóloga
cnavarretek@gmail.com
Diario el Sur www.elsur.cl
Sección Vida de Parejas
Miércoles - Pág 16
El tiempo tiene esa magia que todo lo hace real, puede fortalecer una relación, debilitarla, separarla o reencontrarla por siempre.
A diario escucho a hombres y mujeres que se resisten a soltar lo que a todas luces les hace mal. El miedo, compromisos o el sólo hecho de hablar los paraliza dejando de lado la importancia del tiempo en sus vidas.
Muchas veces hemos escuchado a nuestra abuelita decir “déjalo ir si vuelve es tuyo sino es porque nunca lo fue”. Aún cuando pudiésemos cuestionar la propiedad de sus palabras, tiene a su base lo único que no se puede controlar, el tiempo.
Para muchas personas el tiempo es oro, para otros un recurso escaso, para los que sufren una tortura y para quienes gozan de la vida un deseo de que esto nunca se detenga.
El corazón es una buena orientación en el paso del tiempo, logrando calmar el dolor y definir el curso de la relación. Después de una separación, distanciamiento o quiebre final, el tiempo es el principal aliado de la historia dando paso al perdón, olvido o a la confirmación que esto fue lo mejor para los dos.
Dele tiempo al tiempo, no se trata que sostenga su tristeza sobre falsas ilusiones, sino que logre darse un respiro para que sea el tiempo quien hable de su relación.
Si en verdad usted sigue amando sentirá la paz que el tiempo le da, logrando desde el silencio escuchar lo que dice su intuición. Insisto en que si en verdad usted amo, disfrutará de ver a la otra persona plena, feliz y finalmente mucho mejor que cuando estaban juntos.
Esa sabiduría y gozo en su alma sólo se lo entregará el paso del tiempo. Permítaselo no sólo por usted sino por los dos, dejando que sea este quien finalmente defina lo justo y adecuado para vuestras vidas.
Carola Navarrete Kelly, Psicóloga
cnavarretek@gmail.com
Diario el Sur www.elsur.cl
Sección Vida de Parejas
Miércoles - Pág 16