Psicología Terapias
Muchas veces las personas quieren olvidar aquello que les ha dejado un recuerdo desagradable, vergonzoso o simplemente insoportable. Una investigación publicada recientemente por la revista Cell Press, y realizada por un grupo de neurocientíficos de la Universidad de Cambridge, en Reino Unido, señala que se ha demostrado que los seres humanos utilizan dos procesos para olvidar: la supresión y la sustitución, y que el cerebro trabaja de formas diferentes en cada caso.
Se trata de dos mecanismos distintos que permiten controlar los recuerdos mediante procesos cerebrales diferentes que causan el olvido: el primero interrumpe el proceso de recuperación de recuerdos, y el segundo permite sustituir los eventos desagradables por otros.
Haciendo uso de la resonancia magnética, los científicos examinaron la actividad cerebral de los voluntarios para ésta investigación, los resultados indican que cada mecanismo activa unos circuitos neuronales distintos. Cuando se suprime un recuerdo, se produce una interrupción de los procesos mnemotécnicos gracias al córtex prefrontal dorsolateral, que inhibe la actividad del hipocampo, una región clave para recordar eventos del pasado.
En cambio, cuando se sustituyen unos recuerdos por otros, intervienen dos zonas del cerebro,el córtex prefrontal y el córtex midventrolateral prefrontal, que trabajan para traer determinados recuerdos a nuestra consciencia al tiempo que se ‘borran’ los indeseados. En esa sustitución de los pensamientos intervienen dos elementos: “un recuerdo sustituto, que va a ser recuperado, y otro que nos disgusta”, añaden.Ambas estrategias ,la supresión y la sustitución,resultaron igual de efectivas a la hora de deshacerse de los recuerdos.
El aporte de esta investigación resulta muy útil , pues a partir del conocimiento de los mecanismo de olvido , se podrían desarrollar tratamientos de problemas relacionados con una deficiente memoria.
Referencia Bibliográfica: Benoit & Anderson. “Opposing Mechanisms Support the Voluntary Forgetting of Unwanted Memories”. Cell Press.
Gaby Correa