Lunes, 11 de julio de 2016
Psicología - Sexología - Hipnosis
- Iquique, (Chile)
Psicología
Psicología
Sexualidad Humana en la Tercera Edad
Ps. J. Marcos Valenzuela C.
George Washington #550, La Serena - IV Región.
09-98125680
jmarcosvalenzuelac@hotmail.com
TÍTULO
Sexualidad Humana en la Tercera Edad
Recientes proyecciones establecen una esperanza de vida de 80 años o más. El rango etario establecido en la llamada tercera edad es superior a la cantidad de años establecidos para la adolescencia. Países desarrollados han reducido sus índices de natalidad y aumentado el porcentaje de adultos mayores. Chile, país en vías de desarrollo, comienza a presentar una tendencia similar en este aspecto. Diversos estudios centran su atención en la sexualidad humana en distintas etapas de la vida, sin embargo la tercera edad ha sido poco investigada llegando incluso a ser un tema tabú en la población general. Este estudio dirige su mirada a “nuestros” abuelos, indagando de primera fuente cómo viven su sexualidad: ¿igual, mejor, o peor respecto a los primeros años? Para esto se construyó una batería de preguntas relacionadas con la temática, se realizaron entrevistas individuales a adultos mayores y se analizaron los resultados.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Se sabe que la mayoría de los adultos mayores viven su sexualidad de manera activa (Cayo, Flores, Perea, Pizarro, y Aracena, 2003), sin embargo es un tema poco estudiado y tiende a estar poco presente en el discurso social, tal vez porque confunde, existiendo poca capacitación incluso por parte de profesionales de la salud que eluden el tema y se limitan a contestar sólo si les pregunta (Echeñique, 2006).
La información que se describe a continuación sobre el concepto de sexualidad, debe ser entendida como una experiencia donde se pone en juego no solo lo genital, también participan otras parte del cuerpo como las manos, la piel, el olfato, el gusto y la mirada (Sinay, 1997).
Datos a considerar
El acceso a la salud, ingresos económicos, calidad de vida, etc., son factores que influyen de manera determinante en la cantidad de años que una persona puede llegar a vivir. Actuales proyecciones establecen una esperanza de vida promedio de 70 años para la población mundial, existiendo grandes diferencias entre países desarrollados (84 años) y subdesarrollados (38 años). En nuestro país (Chile) la esperanza de vida promedio es de 80 años (77 años para hombres y 83 años para mujeres) (INE, 2007). Estas cifras permiten reflexionar acerca de la gran cantidad de años que se puede llegar a vivir después de los 60 (años), límite establecido para hablar de tercera edad o adultos mayores. Si se considera que para la adolescencia se establecen 10 años como parte de un ciclo vital, versus los 20 años que puede agrupar la tercera edad, es lógico prestar mayor atención a esta etapa de la vida por ser un periodo de larga data, superior también a la infancia y la juventud.
Los porcentajes de adultos mayores en el mundo aumenta cada año, actualmente el 11% de la población tiene 60 o más años y se espera que esta cifra se duplique para el 2050. Una de las características de los países desarrollados es el envejecimiento de la población y la reducción en los índices de natalidad. En Chile, país en vías de desarrollo, existen 58 adultos mayores por cada 100 menores de 15 años y se estima que en el 2025 la cantidad de adultos mayores iguale a la cantidad de personas menores de 15 años (INE, 2007). Este grupo etario dejó de ser pequeño haciendo necesario reconocerlos, saber que les pasa, conocer sus inquietudes, escuchar sus opiniones, general políticas públicas, etc.
Cambios de la respuesta sexual desde los 50 años (Hombre)
Si pudiéramos dividir de forma teórica la respuesta sexual en cuatro fases, entendiendo que este es un continuo y que cada etapa puede superponerse con la otra en algún momento de la relación íntima, esto quedaría dividido en: Deseo, excitación (meseta), orgasmo y resolución (Blasco, 1993). A partir de ello, se expondrán los cambios vivido en hombres (luego en la mujer) en sus distintas fases de la respuesta sexual (López y Olazábal, 1998).
Deseo: Puede ser menor por razones psicosociales u hormonales.
Excitación: Necesidad de mayor estímulo. Más lenta. Cambios menos vigorosos. Puede haber dificultades en la erección.
Orgasmo: Menor volumen de la eyaculación. Menos contracciones y con menor vigor.
Resolución: Alargamiento del periodo refractario.
Cambios de la respuesta sexual desde los 50 años (Mujer)
Deseo: Puede ser menor por razones psicosociales u hormonales.
Excitación: Necesidad de mayor estímulo. Más lenta. Cambios menos vigorosos. Puede haber dolor.
Orgasmo: Menor contracciones y con menor vigor. Mantención de la capacidad multiorgásmica.
Resolución: No se ve claramente afectada.
Cambios anatómicos y funcionales desde los 50 años (Hombre)
A modo de complemento, se describen los cambios anatómicos y funcionales en hombres (luego en la mujer) (López y Olazábal, 1998).
Anatómicos: Mayor ángulo peneanoabdominal durante la erección máxima, siendo de 90° en la tercera edad. Menor tamaño testicular.
Funcionales: Reducción de los niveles de testosterona circulantes y de su conversión a dihidrotestosterona. Menor sensibilidad peneana. Erección más lenta y se requiere mayor estimulación. Menor turgencia del pene erecto. Reducción del número de erecciones nocturnas involuntarias. Menor ascenso testicular y más lento durante la excitación por laxitud del cremáster. Retraso de la eyaculación, con reducción e incluso ausencia de la sensación de inevitabilidad eyaculatoria. Menor necesidad física de eyacular. Menor volumen de esperma eyaculada. Menor número e intensidad de las contracciones orgásmicas. Alargamiento del periodo refractario (Hasta días antes de conseguir una erección completa).
Cambios anatómicos y funcionales desde los 50 años (Mujer)
Anatómicos: En la figura corporal general. Disminución del tamaño de ovarios trompas y útero. Atrofia de la mucosa de endometrio, cuello uterino y vagina. Vagina más corta, menos elástica, menos lubricada. Menor grado de ácidos del medio vaginal facilitando infecciones. Atrofia de labios mayores. Reducción y adelgazamiento del vello púbico. Pérdida de parte del parénquima mamario y descenso de las mamas por pérdida de elasticidad de los tejidos.
Funcionales: Reducción de los niveles de estrógenos y androgénicos. Enlentecimiento de la fase de excitación sexual. Penetración frecuentemente más difícil y dolorosa por atrofia y menor y más lenta lubricación vaginal. Menor intumescencia del clítoris de la plataforma vaginal. Disminución en frecuencia e intensidad de las contracciones orgásmicas que pueden ser dolorosas. Menor rubor cutáneo y más limitado, tensión muscular en el coito y tensión mamaria. Aceleración del descenso postcoital.
Menopausia versus andropausia
Si bien la mujer vive un hito físico marcado con el cese de su periodo menstrual (menopausia) cerca de los 40 años como parte de un ciclo mayor llamado climaterio, en el hombre no se vive de forma tan clara. Para la mujer, la menopausia viene asociada a cambios hormonales, pudiendo provocar insomnio, irritabilidad, piel seca, engrosamiento del diafragma, cambios vaginales, pérdida de libido, etc., pudiendo causar problemas en su vida sexual. Para el hombre en cambio, la pérdida de testosterona se produce a partir de los 25 años y de forma gradual (1% por año) pudiendo incluso concebir a los 60 o más años (Altman y Hanfling, 2009).
Una vez descritos los cambios experimentados por los adultos mayores en su sexualidad, es fundamental recordar que esta también se ve influenciada por el pasado, siendo relevante la forma en que experimentaron su sexualidad desde la infancia (Castaño, 2011), cómo se configuran las parejas e incluso la configuración de sus patrones inconscientes (Gabbard, 2002; Losso, 2001).
Principales disfunciones en la tercera edad
Si para la población general el porcentaje de disfunciones sexuales puede fluctuar entre el 40 y el 75% según los tipos de estudios (Fundación Universidad-Empresa, 1998), en la mujer las más comunes son la falta de deseo y excitación, y en el hombre la eyaculación precoz e impotencia (Fundación Universidad-Empresa, 1994). Se hace evidente entonces que la tercera edad no escape a esta realidad. Importante destacar que la diferencia de disfunciones según el género podría estar influenciada por el desajuste de los ritmos al iniciar los encuentros amatorios, siendo de relevancia las caricias, los besos y un avance más lento en el caso de las mujeres, y visto como menos excitante y satisfactorio para llegar a lo fundamental en el caso de los hombres (Carrasco, 2001). Si se toma en cuenta que la edad promedio de máxima expresión sexual es entre los 25 y 40 años declinando sostenidamente a partir de cambios físicos y hormonales, las principales disfunciones sexuales en el adulto mayor están relacionas con la disfunción eréctil en el caso de los hombres y la dispareunia en el caso de las mujeres (Castelo y Flores, 2009).
METODOLOGÍA
Problema
El problema es definido como el escaso conocimiento de la sexualidad en la tercera edad, a pesar de que esta es una etapa larguísima que puede durar de 20 a 25 años, superando por mucho a la concentración de años agrupados en la llamada infancia, adolescencia, o juventud.
Tipo de Investigación
Estudio descriptivo cualitativo con un diseño no experimental transversal.
Objetivo general
Conocer la realidad sexual de adultos mayores hoy y cómo se diferencia respecto a la sexualidad vivida en sus primeros años.
Objetivos específicos.
Muestra
No probabilística e intencionada constituida por 16 adultos mayores pertenecientes al Centro Diurno para Adultos Mayores de la ciudad de La Serena que se encuentren en una relación de pareja.
Procedimiento
1) Se realiza una revisión bibliográfica logando identificar las principales variables que influyen en la sexualidad de adultos mayores así como las áreas de interés para el estudio.
2) Se crea una batería de preguntas que logran dar un panorama amplio y detallado de cómo vivirían la sexualidad los adultos mayores y la forma en que esta ha ido cambiando respecto a sus primeros 5 a 10 años de vida sexual.
3) Se identifican los principales centros de adultos mayores en la ciudad de La Serena, con el propósito de acceder a una población cautiva que facilite el acceso a la muestra, decidiendo por el Centro Diurno para Adultos Mayores por tener una cantidad importante de participantes activos (cerca de 100) que asisten de manera periódica al centro.
4) Una vez concretada las formalidades y autorizaciones con la administración del Centro para trabajar con los adultos mayores, se realizan charlas informativas de unos 10 minutos durante una semana para incentivar la inscripción de voluntarios al estudio.
5) A partir de la lista de voluntarios, se decidió reducir la muestra de forma intencionada a adultos mayores que se encuentren en una relación de pareja, asumiendo que este grupo de personas tendría una opción mayor de experimentar una vida sexual.
6) Se realizaron contactos telefónicos con los voluntarios seleccionados y se coordinaron entrevistas individuales en el Centro Diurno para Adultos Mayores a partir de la disposición de tiempos de los participantes.
7) Antes de entrevistarse con los voluntarios, se les explica nuevamente el objetivo del estudio, solicitándoles firmar una autorización de consentimiento. Se realizó una entrevista semi estructurada por voluntario durante unos 60 minutos, registrando sus repuestas en una grabación de audio.
8) Se transcriben y analizan los resultados.
RESULTADOS
Tabla N°1. Datos generales de los entrevistados y pregunta N°1.
Tabla N°2. Pregunta N°2 y 3.
Tabla N°3. Pregunta N° 4 y 5.
Tabla N°4. Pregunta N° 6 y 7.
Tabla N°5. Pregunta N° 8 y 9.
Tabla N°6. Pregunta N° 10 y 11.
Tabla N°7. Pregunta N° 12 y 13.
Tabla N°8. Pregunta N° 14 y 15.
Tabla N°9. Pregunta N° 16 y 17.
Tabla N°10. Pregunta N° 18 y 19.
Tabla N°11. Pregunta N° 20 y 21.
DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN
A partir de los resultados arrojados en esta investigación, se pueden establecer ciertas tendencias generales que coinciden con los estudios revisados en cuanto a los cambios experimentados por adultos mayores en su sexualidad, a saber:
1) Menor frecuencia de los encuentros íntimos, señalando la falta de entusiasmo, disfunción eréctil y la mala relación de pareja como causas principales.
2) Menor deseo de tener encuentros íntimos, señalando la mala relación de pareja como causa principal.
3) Menos excitación en un encuentro íntimo, señalando la falta de entusiasmo como causa principal.
4) Menor intensidad del orgasmo, señalando el dolor, falta de entusiasmo y disfunción eréctil como causas principales.
5) Menor frecuencia de sexo vaginal, señalando la disfunción eréctil y la mala relación de pareja como causas principal.
6) En cuanto a la frecuencia de sexo oral, hay resultados divididos, siendo menor para 5 de los entrevistados, señalando la falta de entusiasmo como causa principal. 5 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando que no les gustaba como causa principal. Y 4 de los entrevistados indicaron tener una mayor frecuencia de esta práctica, señalando la necesidad de una mayor estimulación como causa principal.
7) En cuanto a la frecuencia de sexo anal, hay resultados divididos, siendo menor para 7 de los entrevistados, señalando que no les gusta, incomodidad o dolor como causas principales. Y 8 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando que “no es para eso” como causa principal.
8) En cuanto a la frecuencia de masturbación mutua, hay resultados divididos, siendo menor para 5 de los entrevistados, señalando la falta de entusiasmo como causa principal. 4 de los entrevistados indicaron tener una mayor frecuencia de esta práctica, señalando que le gustaba a su pareja como causa principal. 4 de los entrevistados indicaron mantener la frecuencia de esta práctica, señalando la necesidad de una mayor estimulación como causa principal. Y 3 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando que no les nacía, su marido no lo hace y la crianza como causas principales.
9) En cuanto a la frecuencia de masturbación individual, hay resultados divididos, siendo menor incluso inexistente para 7 de los entrevistados, señalando la falta de interés o de necesidad como causas principales. Y 9 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando la religión, falta de tiempo o de necesidad como causas principales.
10) La mayoría nunca ha incorporado juguetes sexuales en la intimidad, señalando el desconocimiento, falta de interés o de necesidad como causas principales.
11) La mayoría nunca ha incorporado fantasías sexuales en la intimidad, señalando falta de ocurrencia o de necesidad como causas principales.
12) La mayoría nunca ha consumido comercio sexual ni ha incorporado material pornográfico a su intimidad, señalando falta de interés o de necesidad como causas principales.
14) Ningún entrevistado ha incorporado el cibersexo a su intimidad, señalando desconocimiento, falta de interés o de necesidad como causas principales.
15) La mayoría nunca ha sido infiel a su pareja, señalando respeto y cariño a la pareja como causas principales.
16) La mayoría nunca ha incorporado sexo casual a su intimidad, señalando miedo al contagio, falta de ganas o de oportunidades reales como causas principales.
17) Existe mayor preocupación por el cuerpo al momento de un encuentro íntimo, señalando un deterioro de este como causa principal.
18) La incorporación de intervenciones para mejorar la sexualidad es casi nula, señalando el desconocimiento y falta de necesidad como causas principales.
19) Presentan las enfermedades más típicas a esta edad: Hipertensión arterial, diabetes, colesterol alto, problemas cardiacos, hernias, artrosis, hipotiroidismo y depresión. Se destaca que cerca de la mitad de los entrevistados logra dimensionar cómo estas patologías podrían provocar un escenario complejo para los encuentros íntimos, versus la otra mitad de los entrevistados que tiene poca o nula consciencia de ello, dejando de consultar, sin buscar alternativas de solución.
Si bien en general los entrevistados informan menor frecuencia de encuentros íntimos, menos deseo, menos excitación y menor intensidad en los orgasmos alanzados, sí están teniendo encuentros, deseo, excitación y orgasmos, e incluso algunos indican mantener una sexualidad igual o mejor a la de antes.
Restricciones y alcances
Si bien este estudio no busca establecer información estadística, más bien intenta dar una mirada exploratoria de la realidad de “nuestros” adultos mayores respecto a la forma en que viven su sexualidad, cabe mencionar algunas limitantes que podrían servir como guías para mejorar ulteriores investigaciones y obtener una comprensión mayor de la realidad estudiada:
1) Se realizó una sola entrevista por voluntario. Ideal hubiese sido concretar dos o más entrevistas individuales, complementándolas con la técnica del focus group.
2) La mayoría de los voluntarios son mujeres. Ideal hubiese sido acceder a muestras con mayor paridad de género.
3) Se homologaron las respuestas para obtener resultados más comprensibles y resumidos. Ideal hubiese sido transcribir las entrevistas en su totalidad, enriqueciendo el estudio con el lenguaje expresivo y muchas veces coloquial de los voluntarios.
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICAS
Altman, A., y Hanfling, S. (2009). Sexuality in midlife and beyod. Boston-U.S.A. Harvard Health Publications.
Blasco, S. (1993). Camino al orgasmo. Barcelona-España. Editorial Paidós.
Castelo, C., y Flores, B. (2009). Sexualidad humana. Una aproximación integral. Madrid-España. Editorial Panamericana Médica.
Carrasco, M. (2001). Disfunciones sexuales femeninas. España. Editorial Síntesis.
Castaño, R. (2011) La terapia Sexual. Una mira relacional. Madrid-España. Editorial Ágora Relacional.
Cayo, G., Flores, E., Perea, X., Pizarro, M., y Aracena, A. (2003). La sexualidad en la tercera edad y su relación con el bienestar subjetivo. Ponencia presentada en el simposio Viejos y viejas participación, ciudadanía e inclusión social, no publicado. Santiago-Chile. 51 congreso internacional de americanistas.
Echeñique, L. (2006). Estudio de la sexualidad en la tercera edad. Memoria para optar al grado de licenciada en obstetricia y puericultura, no publicado. Valdivia-Chile. Universidad Austral.
Fundación Universidad-Empresa (1994). Disfunciones sexuales. Madrid-España. Groupe Donograph.
Fundación Universidad-Empresa (1998). Terapia sexual. Madrid-España. Bocetto Gráfico|.
Gabbard, G. (2002, 3ª edición). Psiquiatría psicodinámica en la práctica clínica. Buenos Aires-Argentina. Editorial Médica Panamericana.
INE, (2007). Adulto mayor en Chile. Enfoque estadístico. Santiago-Chile. www.ine.cl
López, S., y Olazábal, C. (1998). Sexualidad en la vejez. Madrid-España. Ediciones Pirámide.
Losso, R. (2001). Psicoanálisis de la familia. Recorridos teórico-clínicos. Buenos Aires-Argentina. Grupo editorial Lumen
Muldman, F., y Torres, X. (2008). Manual de educación para embarazadores. Santiago-Chile. Uqbar editores.
Sinay, S. (1997). Esta noche no querida. Buenos Aires-Argentina. Ediciones del Nuevo Extremo.
ANEXOS
Anexo N°1
Anexo N°2
Ps. J. Marcos Valenzuela C.
George Washington #550, La Serena - IV Región.
09-98125680
jmarcosvalenzuelac@hotmail.com
TÍTULO
Sexualidad Humana en la Tercera Edad
RESUMEN |
Recientes proyecciones establecen una esperanza de vida de 80 años o más. El rango etario establecido en la llamada tercera edad es superior a la cantidad de años establecidos para la adolescencia. Países desarrollados han reducido sus índices de natalidad y aumentado el porcentaje de adultos mayores. Chile, país en vías de desarrollo, comienza a presentar una tendencia similar en este aspecto. Diversos estudios centran su atención en la sexualidad humana en distintas etapas de la vida, sin embargo la tercera edad ha sido poco investigada llegando incluso a ser un tema tabú en la población general. Este estudio dirige su mirada a “nuestros” abuelos, indagando de primera fuente cómo viven su sexualidad: ¿igual, mejor, o peor respecto a los primeros años? Para esto se construyó una batería de preguntas relacionadas con la temática, se realizaron entrevistas individuales a adultos mayores y se analizaron los resultados.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Se sabe que la mayoría de los adultos mayores viven su sexualidad de manera activa (Cayo, Flores, Perea, Pizarro, y Aracena, 2003), sin embargo es un tema poco estudiado y tiende a estar poco presente en el discurso social, tal vez porque confunde, existiendo poca capacitación incluso por parte de profesionales de la salud que eluden el tema y se limitan a contestar sólo si les pregunta (Echeñique, 2006).
La información que se describe a continuación sobre el concepto de sexualidad, debe ser entendida como una experiencia donde se pone en juego no solo lo genital, también participan otras parte del cuerpo como las manos, la piel, el olfato, el gusto y la mirada (Sinay, 1997).
Datos a considerar
El acceso a la salud, ingresos económicos, calidad de vida, etc., son factores que influyen de manera determinante en la cantidad de años que una persona puede llegar a vivir. Actuales proyecciones establecen una esperanza de vida promedio de 70 años para la población mundial, existiendo grandes diferencias entre países desarrollados (84 años) y subdesarrollados (38 años). En nuestro país (Chile) la esperanza de vida promedio es de 80 años (77 años para hombres y 83 años para mujeres) (INE, 2007). Estas cifras permiten reflexionar acerca de la gran cantidad de años que se puede llegar a vivir después de los 60 (años), límite establecido para hablar de tercera edad o adultos mayores. Si se considera que para la adolescencia se establecen 10 años como parte de un ciclo vital, versus los 20 años que puede agrupar la tercera edad, es lógico prestar mayor atención a esta etapa de la vida por ser un periodo de larga data, superior también a la infancia y la juventud.
Los porcentajes de adultos mayores en el mundo aumenta cada año, actualmente el 11% de la población tiene 60 o más años y se espera que esta cifra se duplique para el 2050. Una de las características de los países desarrollados es el envejecimiento de la población y la reducción en los índices de natalidad. En Chile, país en vías de desarrollo, existen 58 adultos mayores por cada 100 menores de 15 años y se estima que en el 2025 la cantidad de adultos mayores iguale a la cantidad de personas menores de 15 años (INE, 2007). Este grupo etario dejó de ser pequeño haciendo necesario reconocerlos, saber que les pasa, conocer sus inquietudes, escuchar sus opiniones, general políticas públicas, etc.
Cambios de la respuesta sexual desde los 50 años (Hombre)
Si pudiéramos dividir de forma teórica la respuesta sexual en cuatro fases, entendiendo que este es un continuo y que cada etapa puede superponerse con la otra en algún momento de la relación íntima, esto quedaría dividido en: Deseo, excitación (meseta), orgasmo y resolución (Blasco, 1993). A partir de ello, se expondrán los cambios vivido en hombres (luego en la mujer) en sus distintas fases de la respuesta sexual (López y Olazábal, 1998).
Deseo: Puede ser menor por razones psicosociales u hormonales.
Excitación: Necesidad de mayor estímulo. Más lenta. Cambios menos vigorosos. Puede haber dificultades en la erección.
Orgasmo: Menor volumen de la eyaculación. Menos contracciones y con menor vigor.
Resolución: Alargamiento del periodo refractario.
Cambios de la respuesta sexual desde los 50 años (Mujer)
Deseo: Puede ser menor por razones psicosociales u hormonales.
Excitación: Necesidad de mayor estímulo. Más lenta. Cambios menos vigorosos. Puede haber dolor.
Orgasmo: Menor contracciones y con menor vigor. Mantención de la capacidad multiorgásmica.
Resolución: No se ve claramente afectada.
Cambios anatómicos y funcionales desde los 50 años (Hombre)
A modo de complemento, se describen los cambios anatómicos y funcionales en hombres (luego en la mujer) (López y Olazábal, 1998).
Anatómicos: Mayor ángulo peneanoabdominal durante la erección máxima, siendo de 90° en la tercera edad. Menor tamaño testicular.
Funcionales: Reducción de los niveles de testosterona circulantes y de su conversión a dihidrotestosterona. Menor sensibilidad peneana. Erección más lenta y se requiere mayor estimulación. Menor turgencia del pene erecto. Reducción del número de erecciones nocturnas involuntarias. Menor ascenso testicular y más lento durante la excitación por laxitud del cremáster. Retraso de la eyaculación, con reducción e incluso ausencia de la sensación de inevitabilidad eyaculatoria. Menor necesidad física de eyacular. Menor volumen de esperma eyaculada. Menor número e intensidad de las contracciones orgásmicas. Alargamiento del periodo refractario (Hasta días antes de conseguir una erección completa).
Cambios anatómicos y funcionales desde los 50 años (Mujer)
Anatómicos: En la figura corporal general. Disminución del tamaño de ovarios trompas y útero. Atrofia de la mucosa de endometrio, cuello uterino y vagina. Vagina más corta, menos elástica, menos lubricada. Menor grado de ácidos del medio vaginal facilitando infecciones. Atrofia de labios mayores. Reducción y adelgazamiento del vello púbico. Pérdida de parte del parénquima mamario y descenso de las mamas por pérdida de elasticidad de los tejidos.
Funcionales: Reducción de los niveles de estrógenos y androgénicos. Enlentecimiento de la fase de excitación sexual. Penetración frecuentemente más difícil y dolorosa por atrofia y menor y más lenta lubricación vaginal. Menor intumescencia del clítoris de la plataforma vaginal. Disminución en frecuencia e intensidad de las contracciones orgásmicas que pueden ser dolorosas. Menor rubor cutáneo y más limitado, tensión muscular en el coito y tensión mamaria. Aceleración del descenso postcoital.
Menopausia versus andropausia
Si bien la mujer vive un hito físico marcado con el cese de su periodo menstrual (menopausia) cerca de los 40 años como parte de un ciclo mayor llamado climaterio, en el hombre no se vive de forma tan clara. Para la mujer, la menopausia viene asociada a cambios hormonales, pudiendo provocar insomnio, irritabilidad, piel seca, engrosamiento del diafragma, cambios vaginales, pérdida de libido, etc., pudiendo causar problemas en su vida sexual. Para el hombre en cambio, la pérdida de testosterona se produce a partir de los 25 años y de forma gradual (1% por año) pudiendo incluso concebir a los 60 o más años (Altman y Hanfling, 2009).
Una vez descritos los cambios experimentados por los adultos mayores en su sexualidad, es fundamental recordar que esta también se ve influenciada por el pasado, siendo relevante la forma en que experimentaron su sexualidad desde la infancia (Castaño, 2011), cómo se configuran las parejas e incluso la configuración de sus patrones inconscientes (Gabbard, 2002; Losso, 2001).
Principales disfunciones en la tercera edad
Si para la población general el porcentaje de disfunciones sexuales puede fluctuar entre el 40 y el 75% según los tipos de estudios (Fundación Universidad-Empresa, 1998), en la mujer las más comunes son la falta de deseo y excitación, y en el hombre la eyaculación precoz e impotencia (Fundación Universidad-Empresa, 1994). Se hace evidente entonces que la tercera edad no escape a esta realidad. Importante destacar que la diferencia de disfunciones según el género podría estar influenciada por el desajuste de los ritmos al iniciar los encuentros amatorios, siendo de relevancia las caricias, los besos y un avance más lento en el caso de las mujeres, y visto como menos excitante y satisfactorio para llegar a lo fundamental en el caso de los hombres (Carrasco, 2001). Si se toma en cuenta que la edad promedio de máxima expresión sexual es entre los 25 y 40 años declinando sostenidamente a partir de cambios físicos y hormonales, las principales disfunciones sexuales en el adulto mayor están relacionas con la disfunción eréctil en el caso de los hombres y la dispareunia en el caso de las mujeres (Castelo y Flores, 2009).
METODOLOGÍA
Problema
El problema es definido como el escaso conocimiento de la sexualidad en la tercera edad, a pesar de que esta es una etapa larguísima que puede durar de 20 a 25 años, superando por mucho a la concentración de años agrupados en la llamada infancia, adolescencia, o juventud.
Tipo de Investigación
Estudio descriptivo cualitativo con un diseño no experimental transversal.
Objetivo general
Conocer la realidad sexual de adultos mayores hoy y cómo se diferencia respecto a la sexualidad vivida en sus primeros años.
Objetivos específicos.
- Construcción de una batería de preguntas relacionadas con la sexualidad en la tercera edad.
- Determinar y acceder a muestras específicas.
- Realizar entrevistas individuales semi estructuradas.
- Identificar los principales cambios de la sexualidad en adultos mayores.
Muestra
No probabilística e intencionada constituida por 16 adultos mayores pertenecientes al Centro Diurno para Adultos Mayores de la ciudad de La Serena que se encuentren en una relación de pareja.
Procedimiento
1) Se realiza una revisión bibliográfica logando identificar las principales variables que influyen en la sexualidad de adultos mayores así como las áreas de interés para el estudio.
2) Se crea una batería de preguntas que logran dar un panorama amplio y detallado de cómo vivirían la sexualidad los adultos mayores y la forma en que esta ha ido cambiando respecto a sus primeros 5 a 10 años de vida sexual.
3) Se identifican los principales centros de adultos mayores en la ciudad de La Serena, con el propósito de acceder a una población cautiva que facilite el acceso a la muestra, decidiendo por el Centro Diurno para Adultos Mayores por tener una cantidad importante de participantes activos (cerca de 100) que asisten de manera periódica al centro.
4) Una vez concretada las formalidades y autorizaciones con la administración del Centro para trabajar con los adultos mayores, se realizan charlas informativas de unos 10 minutos durante una semana para incentivar la inscripción de voluntarios al estudio.
5) A partir de la lista de voluntarios, se decidió reducir la muestra de forma intencionada a adultos mayores que se encuentren en una relación de pareja, asumiendo que este grupo de personas tendría una opción mayor de experimentar una vida sexual.
6) Se realizaron contactos telefónicos con los voluntarios seleccionados y se coordinaron entrevistas individuales en el Centro Diurno para Adultos Mayores a partir de la disposición de tiempos de los participantes.
7) Antes de entrevistarse con los voluntarios, se les explica nuevamente el objetivo del estudio, solicitándoles firmar una autorización de consentimiento. Se realizó una entrevista semi estructurada por voluntario durante unos 60 minutos, registrando sus repuestas en una grabación de audio.
8) Se transcriben y analizan los resultados.
RESULTADOS
Tabla N°1. Datos generales de los entrevistados y pregunta N°1.
Entrevistado (E) | Sexo | Edad | Situación de pareja | 1 ¿A qué edad comenzó su actividad sexual? |
1 | M | 65 | Casado | 17 |
2 | F | 72 | Casada | 17 |
3 | F | 62 | Casada | 15 |
4 | F | 71 | Casada | 17 |
5 | F | 61 | Casada | 24 |
6 | F | 69 | Casada | 24 |
7 | F | 71 | Casada | 20 |
8 | M | 83 | Conviviente | 18 |
9 | F | 66 | Casada | 23 |
10 | F | 71 | Casada | 21 |
11 | F | 62 | Casada | 21 |
12 | F | 69 | Conviviente | 13 |
13 | F | 83 | Conviviente | 55 |
14 | M | 75 | Casado | 12 |
15 | F | 68 | Casada | 15 |
16 | F | 72 | Pololeando | 14 |
Tabla N°2. Pregunta N°2 y 3.
E | 2 ¿La frecuencia de sus encuentros íntimos es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 3 ¿El deseo por tener encuentros íntimos, es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Menor - Falta de entusiasmo. | Menor - NS |
2 | Menor - Falta de entusiasmo, falta de placer, dolor. | Menor - Dolor |
3 | Igual - No Sabe (NS) | Menor - Acostumbramiento, mala relación de pareja. |
4 | Mayor - Más experiencia, sin hijos, buena relación de pareja. | Mayor - Estar con un mejor amante. |
5 | Menor - Operación (Histerectomía). | Menor - NS |
6 | Menor - Disfunción eréctil (De la pareja). | Menor - NS |
7 | Menor - Mala relación de pareja | Menor - Mala relación de pareja |
8 | Menor - Disfunción eréctil. | Mayor - Amor. |
9 | Menor - Mala relación de pareja. | Menor - Pérdida de cariño. |
10 | Menor (Nada hace dos años) - Disfunción eréctil. | Menor - Pareja poco cariñoso. |
11 | Mayor - Por darle gusto a su pareja. | Nunca - Daño psicológico. |
12 | Menor - Falta de entusiasmo. | Menor - Pareja poco cariñoso, medicamentos para la diabetes. |
13 | Igual - Hay atracción y cariño. | Menor - Deterioro del cuerpo, más tranquila. |
14 | Menor - Falta de entusiasmo (De mi pareja). | Igual - NS |
15 | Menor - Falta de entusiasmo. | Menor - NS. |
16 | Igual - Hay disfrute. | Igual - NS |
Tabla N°3. Pregunta N° 4 y 5.
E | 4 ¿El nivel de excitación alcanzado en sus encuentros íntimos, es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 5 ¿La intensidad de sus orgasmos, es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Menor - Desgaste natural de la edad. | Menor - NS. |
2 | Menor - Falta de besos, dolor. | Menor - Dolor. |
3 | Igual - Nos conocemos. | Igual - NS |
4 | Mayor - Estar con un mejor amante. | Mayor - Buena excitación. |
5 | Menor - Falta de entusiasmo. | Menor - Dolor, poca excitación. |
6 | Menor - Operación (Histerectomía) | Menor - Operación (Histerectomía). |
7 | Menor - Mala relación de pareja | Menor - Mala relación de pareja |
8 | Mayor - Menos trabajo, más tiempo. | Mayor - Siento en todo el cuerpo. |
9 | Menor - Pérdida del cariño. | Menor - Falta de entusiasmo, poca excitación. |
10 | Menor - Falta de entusiasmo. | Igual - NS |
11 | Nunca - Mucho tabú. | Igual (Nunca) - No sirvo, NS. |
12 | Menor - Poca estimulación (No lo dejo por vergüenza a mi cuerpo). | Igual - NS. |
13 | Menor - Disfunción eréctil. | Menor - Disfunción eréctil. |
14 | Igual - NS | Menor - Disfunción eréctil. |
15 | Menor - Lo hago por mi marido. | Menor - Eyaculación precoz. |
16 | Igual - NS. | Mayor - NS. |
Tabla N°4. Pregunta N° 6 y 7.
E | 6 ¿La frecuencia del sexo vaginal es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 7 ¿La frecuencia del sexo oral es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Menor - NS. | Menor - NS |
2 | Menor - Miedo al dolor. | Mayor - Para mayor estimulación. |
3 | Igual - Es lo normal. | Menor - Falta de entusiasmo. |
4 | Igual - Es lo normal. | Mayor - Estar con un mejor amante. |
5 | Igual - Es lo que mi pareja hace. | Nunca - Mi marido no lo hace. |
6 | Menor - Disfunción eréctil (Pareja). | Nunca - No me gustaría. |
7 | Menor - Mala relación de pareja | Nunca - Me repugna. |
8 | Menor - Esposa cansada, disfunción eréctil. | Mayor - Para mayor estimulación, cariño. |
9 | Menor - Pareja poco cariñoso. | Igual - Para mayor estimulación. |
10 | Menor - Disfunción eréctil (Pareja). | Menor - Falta de entusiasmo. |
11 | Mayor - Por darle gusto a su pareja. | Nunca - Pueden salir cosas en la boca. |
12 | Menor - Falta de entusiasmo. | Nunca - Asco. |
13 | Menos - Disfunción eréctil. | Igual - Disfunción eréctil. |
14 | Menor - Disfunción eréctil. | Menor - Falta de entusiasmo. |
15 | Menor - NS. | Menor - NS. |
16 | Mayor - Para variar las prácticas. | Mayor - Nueva pareja, a él le gusta. |
Tabla N°5. Pregunta N° 8 y 9.
E | 8 ¿La frecuencia del sexo anal es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 9 ¿La frecuencia de la masturbación mutua es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Nunca - No le gusta | Igual - Por gusto |
2 | Menor - Poca estimulación, vivir con hijo y nietos (Preocupación) | Igual - Para lograr mayor estimulación |
3 | Nunca - Es sucio. | Menor - NS |
4 | Nunca - Me da cosa. | Mayor - Estar con un mejor amante. |
5 | Nunca - Mi marido no lo hace, miedo, vergüenza. | Nunca - Mi marido no lo hace. |
6 | Nunca - No es para eso. | Menor - Falta de entusiasmo. |
7 | Nunca - No es para eso. | Menor - Mala relación de pareja |
8 | Menor - Disfunción eréctil. | Mayor - Más tiempo, menos trabajo. |
9 | Menor – No me gusta, temor de contagio. | Igual - Para alcanzar mayor estimulación. |
10 | Menor - Menos curiosidad, no me gusta, lo hacía por complacerlo. | Menor - Falta de entusiasmo. |
11 | Nunca - Por tener hemorroide. | Nunca - No me nace. |
12 | Menor – Es fome, sucio, doloroso, no me gusta. | Nunca - Crianza. |
13 | Menor - Incomodidad. | Igual - Mayor estimulación. |
14 | Menor - Desinterés de la pareja. | Mayor - Mayor estimulación. |
15 | Nunca - No es para eso. | Menor - Frustración por no alcanzar el orgasmo. |
16 | Mayor - A mi nueva pareja le gusta. | Mayor - Nueva pareja, a él le gusta . |
Tabla N°6. Pregunta N° 10 y 11.
E | 10 ¿La frecuencia de la masturbación individual es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 11 ¿La frecuencia en el uso de juguetes sexuales es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Menor (Ahora nada) - Maduré, ya pasé por eso | Nunca - Desconocimiento. |
2 | Nunca - Asco | Menos - Dolor |
3 | Menor (Ahora nada) - Estoy en pareja. | Nunca - Falta de interés. |
4 | Nunca - No lo he necesitado. | Nunca - Falta de interés. |
5 | Nunca - Falta de interés. | Nunca - Desconocimiento. |
6 | Nunca - No estoy de acuerdo. | Nunca - Falta de interés. |
7 | Menor (Ahora nada) - No me llama la atención. | Nunca - Desconocimiento. |
8 | Nunca - Falta de tiempo, trabajaba. | Nunca - Falta de interés. |
9 | Nunca - NS. | Nunca - Desconocimiento. |
10 | Menor - Falta de interés. | Nunca - Falta de interés. |
11 | Nunca - Por la religión. | Nunca - Es peligroso. |
12 | Nunca - No corresponde, religión. | Nunca - Falta de interés. |
13 | Menor (Ahora nada) - No hay necesidad. | Nunca - Desconocimiento. |
14 | Menor - Falta de interés. | Nunca - Falta de necesidad. |
15 | Menor - Culpa, sentir que traiciono a mi esposo. | Nunca - Desconocimiento. |
16 | Nunca - Cansancio, falta de tiempo, sexualidad activa. | Nunca - Desconocimiento, falta de necesidad. |
Tabla N°7. Pregunta N° 12 y 13.
E | 12 ¿La frecuencia en el uso de fantasías sexuales es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 13 ¿La frecuencia en el consumo del comercio sexual es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Nunca - No se me ocurre. | Nunca - NS. |
2 | Nunca - Me sentiría rebajada, por crianza. | Nunca - Crianza |
3 | Nunca - No me gusta. | Nunca - Tengo que conocer a la persona para estar con ella. |
4 | Menor - Vergüenza del cuerpo. | Nunca - Crianza |
5 | Menor - Operación (Histerectomía). | Nunca - Crianza. |
6 | Menor - Falta de interés. | Nunca - Falta de interés. |
7 | Nunca - Desconocimiento. | Nunca - Por respeto a mí y a mi pareja, me produce asco. |
8 | Nunca - Mucho trabajo, disfunción eréctil. | Menor - Miedo a enfermedades. |
9 | Nunca - Mi esposo pensaría mal, no se me ocurre. | Nunca - Encuentro el colmo, riesgo de contagio. |
10 | Menor - Falta de interés. | Nunca - Falta de necesidad. |
11 | Nunca - NS. | Nunca - Falta de necesidad. |
12 | Nunca - No se me ocurre. | Nunca - Porque se tiene que hace por amor. |
13 | Nunca - Falta de necesidad. | Nunca - Religión. |
14 | Nunca - Falta de necesidad. | Nunca - NS |
15 | Nunca - Desconocimiento. | Nunca - Falta de necesidad. |
16 | Nunca - No se me ocurre. | Nunca - NS. |
Tabla N°8. Pregunta N° 14 y 15.
E | 14 ¿La frecuencia en el uso de pornografía es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 15 ¿La frecuencia en el uso de cibersexo es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Nunca - Falta de interés. | Nunca - Desconocimiento |
2 | Menor - NS | Nunca - No me gusta, por vergüenza, indigno. |
3 | Menor - No me gusta, lo hago por mi marido, él consume menos. | Nunca - Falta de interés. |
4 | Nunca - Falta de necesidad. | Nunca - Falta de necesidad. |
5 | Nunca - Falta de interés. | Nunca - Desconocimiento. |
6 | Nunca - Es pecado. | Nunca - Repugnancia. |
7 | Menor - Mala relación de pareja | Nunca - Desconocimiento. |
8 | Nunca - No me gusta. | Nunca - No tengo cómo. |
9 | Mayor - Él la puso una vez. | Nunca - Falta de interés. |
10 | Menor - Falta de interés. | Nunca - Falta de interés. |
11 | Nunca - No me gustan, no es real. | Nunca - Falta de acceso. |
12 | Mayor - Mayor acceso. | Nunca - Desconocimiento. |
13 | Nunca - Falta de interés. | Nunca - Desconocimiento. |
14 | Nunca - Falta de necesidad. | Nunca - Falta de interés. |
15 | Mayor - Mayor acceso. | Nunca - Desconocimiento. |
16 | Nunca - Falta de necesidad. | Nunca - Falta de necesidad. |
Tabla N°9. Pregunta N° 16 y 17.
E | 16 ¿La frecuencia en la práctica de la infidelidad es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? | 17 ¿La frecuencia de encuentros sexuales casuales es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Nunca - No le gusta | Nunca - Miedo a contagiarme. |
2 | Nunca - El único que me merece es mi marido. | Nunca - Miedo a repetir mi historia personal. |
3 | Nunca - Por respeto. | Nunca - No me llama la atención, se ve mal la mujer. |
4 | Nunca - Es denigrante. | Nunca - No lo necesité, no tuve la oportunidad. |
5 | Nunca - Amo y respeto a mi marido. Por mis hijos. | Nunca - No he tenido la oportunidad, amo a mi marido. |
6 | Nunca - Por respeto a mi marido e hijos. | Nunca - Crianza. |
7 | Nunca - Crianza. | Nunca - Crianza. |
8 | Nunca - NS. | Nunca - No tengo posibilidades. |
9 | Nunca - Me choca. | Nunca - Me choca. |
10 | Nunca - Estoy conforme con marido. | Nunca - Estoy conforme con marido. |
11 | Nunca - Está malo, se desacredita la mujer. | Nunca - Miedo a contagiarme. |
12 | Nunca - Se tiene que hacer por amor. | Nunca - No me gusta, me sentiría mal. |
13 | Nunca - Crianza. | Nunca - Crianza. |
14 | Menor - Disfunción eréctil. | Menor - Disfunción eréctil. |
15 | Nunca - Falta de ganas y ocasión. | Nunca - Falta de ganas, hay que conocer a la persona. |
16 | Nunca - Respeto y cariño a mi pareja. | Nunca - Tengo que estar enamorada. |
Tabla N°10. Pregunta N° 18 y 19.
E | 18 ¿El aspecto físico influye en su sexualidad menos, igual o más que antes? - ¿Por qué? | 19 ¿La frecuencia de intervenciones para mejorar su sexualidad es menor, igual o mayor que antes? - ¿Por qué? |
1 | Igual - NS | Nunca - NS |
2 | Igual - NS | Más (Viagra, lubricante) - No había necesidad. |
3 | Menor - Ya nos conocemos. | Nunca - No lo necesito. |
4 | Mayor - Sobre peso. | Nunca - NS |
5 | Mayor - Sobre peso. | Nunca - Falta de conocimiento. |
6 | Menor - No puedo aspirar a más. | Nunca - No nos hemos ocupado. |
7 | Igual - Mala relación de pareja | Nunca - Mala relación de pareja |
8 | Mayor - Estoy más deteriorado. | Nunca - Desconocimiento. |
9 | Igual - NS. | Nunca - No lo necesito. |
10 | Menor - Menos preocupación. | Más - Disfunción eréctil (esposo). |
11 | Igual - NS. | Nunca - No las necesito. |
12 | Mayor - Estoy más deteriorado. | Nunca - Desconocimiento. |
13 | Igual - No he cambiado. | Nunca - Mi esposo lo vería mal. |
14 | Igual - Es más importante lo que se habla que el físico. | Mayor - Disfunción eréctil. |
15 | Igual - Vergüenza. | Nunca - Desconocimiento. |
16 | Nunca - NS. | Nunca - Falta de necesidad. |
Tabla N°11. Pregunta N° 20 y 21.
E | 20 ¿Ha sido diagnosticado, operado, o se encuentra en tratamiento por alguna enfermedad cardíaca, hipertensión arterial, diabetes, artritis, cáncer, depresión, etc.? - ¿Esto influye en su sexualidad? | 21 ¿Qué otras diferencias podría mencionar en cuanto a la sexualidad de antes/ahora? |
1 | Presión alta, operado de hernia al lado de los testículos - Disfunción eréctil. | Menos entusiasmo |
2 | 3 Baypass, operación de aneurisma, diabetes, hernia umbilical, asma bronquial, artrosis de cadera, hipertensión - No | Estoy preocupada por mejorar mi sexualidad. |
3 | Principio de artrosis, colesterol alto - No. | Menos encuentros en una noche, más rutinario. |
4 | Hipertensión, resistencia a la insulina, dolores leves a los huesos - No. | Ahora es mejor. |
5 | Hipertensión, diabetes, problemas coronarios, histerectomía - Los síntomas son un mal escenario para la sexualidad, mi esposo tiene menos interés en mí. | Esposo menos romántico, menos entretenido, menos cariñoso. |
6 | Hipertensión, artrosis - Incomodidad por dolor. | Menos activos, separación de cama por ronquidos. |
7 | Hígado graso, extirpación de vesícula, hipotiroidismo, colesterol alto - NS. | Me sentiría sucia tener relaciones ahora. |
8 | Operado de la próstata, problemas a la columna, lumbago crónico, cansancio, hipertensión - Disfunción eréctil, poca energía. | Tenemos más tiempo. |
9 | Tuve cáncer a la mama izquierda (Extirparon) - No. | Tengo mayor información. |
10 | Hipotiroidismo, problemas cardiacos, hipertensión - No. | Menos salidas, menos pololeo. |
11 | Prolapso, hipertensa, diabetes, hipotiroidismo, colesterol alto, bipolar - Falta de ganas. | |
12 | Depresión, diabetes, hipertensión - Me enojo con marido y tengo menos encuentros. | No puedo tomar un trago para incentivarse por las enfermedades. |
13 | Extirpación del dedo del pie por melanoma, hernia estomacal, resfrío crónico, artrosis, calambres - Cuando me enfermo no puedo tener encuentros. | |
14 | Diabetes, hipertensión, arritmia, fibrosis auricular izquierda, operación de hernia - Disfunción eréctil. | Menos esperma en la eyaculación. |
15 | NS - NS. | |
16 | Extirparon parte de la mama por cáncer - No. | He experimentado cosas nuevas, mayor disfrute en general. |
DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN
A partir de los resultados arrojados en esta investigación, se pueden establecer ciertas tendencias generales que coinciden con los estudios revisados en cuanto a los cambios experimentados por adultos mayores en su sexualidad, a saber:
1) Menor frecuencia de los encuentros íntimos, señalando la falta de entusiasmo, disfunción eréctil y la mala relación de pareja como causas principales.
2) Menor deseo de tener encuentros íntimos, señalando la mala relación de pareja como causa principal.
3) Menos excitación en un encuentro íntimo, señalando la falta de entusiasmo como causa principal.
4) Menor intensidad del orgasmo, señalando el dolor, falta de entusiasmo y disfunción eréctil como causas principales.
5) Menor frecuencia de sexo vaginal, señalando la disfunción eréctil y la mala relación de pareja como causas principal.
6) En cuanto a la frecuencia de sexo oral, hay resultados divididos, siendo menor para 5 de los entrevistados, señalando la falta de entusiasmo como causa principal. 5 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando que no les gustaba como causa principal. Y 4 de los entrevistados indicaron tener una mayor frecuencia de esta práctica, señalando la necesidad de una mayor estimulación como causa principal.
7) En cuanto a la frecuencia de sexo anal, hay resultados divididos, siendo menor para 7 de los entrevistados, señalando que no les gusta, incomodidad o dolor como causas principales. Y 8 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando que “no es para eso” como causa principal.
8) En cuanto a la frecuencia de masturbación mutua, hay resultados divididos, siendo menor para 5 de los entrevistados, señalando la falta de entusiasmo como causa principal. 4 de los entrevistados indicaron tener una mayor frecuencia de esta práctica, señalando que le gustaba a su pareja como causa principal. 4 de los entrevistados indicaron mantener la frecuencia de esta práctica, señalando la necesidad de una mayor estimulación como causa principal. Y 3 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando que no les nacía, su marido no lo hace y la crianza como causas principales.
9) En cuanto a la frecuencia de masturbación individual, hay resultados divididos, siendo menor incluso inexistente para 7 de los entrevistados, señalando la falta de interés o de necesidad como causas principales. Y 9 de los entrevistados indicaron nunca haber realizado esta práctica, señalando la religión, falta de tiempo o de necesidad como causas principales.
10) La mayoría nunca ha incorporado juguetes sexuales en la intimidad, señalando el desconocimiento, falta de interés o de necesidad como causas principales.
11) La mayoría nunca ha incorporado fantasías sexuales en la intimidad, señalando falta de ocurrencia o de necesidad como causas principales.
12) La mayoría nunca ha consumido comercio sexual ni ha incorporado material pornográfico a su intimidad, señalando falta de interés o de necesidad como causas principales.
14) Ningún entrevistado ha incorporado el cibersexo a su intimidad, señalando desconocimiento, falta de interés o de necesidad como causas principales.
15) La mayoría nunca ha sido infiel a su pareja, señalando respeto y cariño a la pareja como causas principales.
16) La mayoría nunca ha incorporado sexo casual a su intimidad, señalando miedo al contagio, falta de ganas o de oportunidades reales como causas principales.
17) Existe mayor preocupación por el cuerpo al momento de un encuentro íntimo, señalando un deterioro de este como causa principal.
18) La incorporación de intervenciones para mejorar la sexualidad es casi nula, señalando el desconocimiento y falta de necesidad como causas principales.
19) Presentan las enfermedades más típicas a esta edad: Hipertensión arterial, diabetes, colesterol alto, problemas cardiacos, hernias, artrosis, hipotiroidismo y depresión. Se destaca que cerca de la mitad de los entrevistados logra dimensionar cómo estas patologías podrían provocar un escenario complejo para los encuentros íntimos, versus la otra mitad de los entrevistados que tiene poca o nula consciencia de ello, dejando de consultar, sin buscar alternativas de solución.
Si bien en general los entrevistados informan menor frecuencia de encuentros íntimos, menos deseo, menos excitación y menor intensidad en los orgasmos alanzados, sí están teniendo encuentros, deseo, excitación y orgasmos, e incluso algunos indican mantener una sexualidad igual o mejor a la de antes.
Restricciones y alcances
Si bien este estudio no busca establecer información estadística, más bien intenta dar una mirada exploratoria de la realidad de “nuestros” adultos mayores respecto a la forma en que viven su sexualidad, cabe mencionar algunas limitantes que podrían servir como guías para mejorar ulteriores investigaciones y obtener una comprensión mayor de la realidad estudiada:
1) Se realizó una sola entrevista por voluntario. Ideal hubiese sido concretar dos o más entrevistas individuales, complementándolas con la técnica del focus group.
2) La mayoría de los voluntarios son mujeres. Ideal hubiese sido acceder a muestras con mayor paridad de género.
3) Se homologaron las respuestas para obtener resultados más comprensibles y resumidos. Ideal hubiese sido transcribir las entrevistas en su totalidad, enriqueciendo el estudio con el lenguaje expresivo y muchas veces coloquial de los voluntarios.
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICAS
Altman, A., y Hanfling, S. (2009). Sexuality in midlife and beyod. Boston-U.S.A. Harvard Health Publications.
Blasco, S. (1993). Camino al orgasmo. Barcelona-España. Editorial Paidós.
Castelo, C., y Flores, B. (2009). Sexualidad humana. Una aproximación integral. Madrid-España. Editorial Panamericana Médica.
Carrasco, M. (2001). Disfunciones sexuales femeninas. España. Editorial Síntesis.
Castaño, R. (2011) La terapia Sexual. Una mira relacional. Madrid-España. Editorial Ágora Relacional.
Cayo, G., Flores, E., Perea, X., Pizarro, M., y Aracena, A. (2003). La sexualidad en la tercera edad y su relación con el bienestar subjetivo. Ponencia presentada en el simposio Viejos y viejas participación, ciudadanía e inclusión social, no publicado. Santiago-Chile. 51 congreso internacional de americanistas.
Echeñique, L. (2006). Estudio de la sexualidad en la tercera edad. Memoria para optar al grado de licenciada en obstetricia y puericultura, no publicado. Valdivia-Chile. Universidad Austral.
Fundación Universidad-Empresa (1994). Disfunciones sexuales. Madrid-España. Groupe Donograph.
Fundación Universidad-Empresa (1998). Terapia sexual. Madrid-España. Bocetto Gráfico|.
Gabbard, G. (2002, 3ª edición). Psiquiatría psicodinámica en la práctica clínica. Buenos Aires-Argentina. Editorial Médica Panamericana.
INE, (2007). Adulto mayor en Chile. Enfoque estadístico. Santiago-Chile. www.ine.cl
López, S., y Olazábal, C. (1998). Sexualidad en la vejez. Madrid-España. Ediciones Pirámide.
Losso, R. (2001). Psicoanálisis de la familia. Recorridos teórico-clínicos. Buenos Aires-Argentina. Grupo editorial Lumen
Muldman, F., y Torres, X. (2008). Manual de educación para embarazadores. Santiago-Chile. Uqbar editores.
Sinay, S. (1997). Esta noche no querida. Buenos Aires-Argentina. Ediciones del Nuevo Extremo.
ANEXOS
Anexo N°1
Autorización de Consentimiento Investigador responsable : Ps. José Marcos Valenzuela Cordero. Titulo de la investigación : Sexualidad Humana en la Tercera Edad. Instituciones que respaldan : Sociedad Chilena de Sexología y Educación Sexual, y el Instituto de Urología y Sexología. Se me ha solicitado participar en una investigación que tiene como propósito conocer las opiniones, prácticas y experiencias de la sexualidad en personas de la tercera edad. Al participar en este estudio estoy en pleno conocimiento de los objetivos de la investigación y estoy de acuerdo en que: 1) Mi participación tiene asegurada la privacidad y confidencialidad de los testimonios dados. 2) Podré retractarme de participar en este estudio en cualquier momento sin dar razones. 3) Los resultados de este estudio pueden ser publicados con propósitos académicos, pero mi nombre o identidad no serán revelados. 4) Este consentimiento está dado voluntariamente sin que haya sido forzado(a) u obligado(a). |
Anexo N°2
Batería de preguntas
|