Martes, 16 de diciembre de 2014
ANNA BRENCHAT PSICOLOGA Y PSICO-ONCÓLOGA
- Castellón de la Plana, (España)
Psicología
Psicología
En este post quiero explicar qué es el DUELO y explicar algunos FALSOS MITOS asociados a él, cosas que no ayudan, síntomas, QUE ES “NORMAL” y cuando una persona debería buscar ayuda psicológica especializada. En estos días iré escribiendo algunos aspectos que, según mi criterio, pueden ayudar.
ATENCIÓN PSICOLOGICA AL DUELO
Según la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL), << El duelo se refiere a un estado de pensamiento, sentimiento y actividad que se produce como consecuencia de la pérdida de una persona o cosa amada, asociándose a síntomas físicos y emocionales. La pérdida es psicológicamente traumática en la misma medida que una herida o quemadura, por lo cual siempre es dolorosa. Necesita un tiempo y un proceso para volver al equilibrio normal que es lo que constituye el duelo>>.
Momentos iniciales
Todos nosotros, en algún momento de nuestra vida, experimentaremos la pérdida de un ser querido. El duelo, o proceso de recuperación, es un periodo único, y cada persona lo vive de una manera distinta. Al comienzo es normal sentir confusión, incredulidad, consternación; también es posible que niegues la muerte. Los primeros días y semanas puedes sentirte como anestesiado, o con sentimientos de irrealidad: es muy difícil aceptar lo que ha sucedido. Puedes creer que has visto a la persona y estar esperando su regreso. También a veces puedes sentirte desequilibrado, con fuertes altibajos.
Algunos expertos sugieren que esta primera fase tienen una función protectora, que nos permite, desde esta sensación de irrealidad, hacer frente a lo mucho que hay que hacer en estos momentos: ocuparse del funeral, atender a las visitas, organizar los papeles, ocuparse de los mayores y de los niños.
A pesar de lo que pueda parecerte, NO TE ESTÁS VOLVIENDO LOCO.
Lo que estás viviendo es absolutamente normal y es importante vivirlo.
Síntomas físicos y emocionales
Poco a poco, a medida que pasan las semanas la realidad va emergiendo, la pérdida se hace más presente y podemos sentirnos tristes, desesperanzados, solos, culpables, muy enfadados o todo a la vez.
El dolor también se vive físicamente: sentimos un vacío en el estómago, un nudo en la garganta, ardor en el abdomen, el corazón partido. Todas estas sensaciones son absolutamente normales También es normal que no podamos concentrarnos en nada, que seamos incapaces de leer el periódico, que cualquier noticia nos intensifique el dolor. A pesar de todos estos síntomas es importante recordar que el duelo no es una enfermedad, y que si experimentamos esas sensaciones es porque estamos vivos, somos humanos y hemos amado. No sentir dolor es una forma de duelo complicado.
Recuerda que es importante descansar, dormir y comer bien.
Haz ejercicio regularmente: el deporte es el mejor antidepresivo natural
FALSAS CREENCIAS EN EL DUELO
LO QUE NO TE AYUDARÁ si estás en duelo es creer que:
ATENCIÓN PSICOLOGICA AL DUELO
Según la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL), << El duelo se refiere a un estado de pensamiento, sentimiento y actividad que se produce como consecuencia de la pérdida de una persona o cosa amada, asociándose a síntomas físicos y emocionales. La pérdida es psicológicamente traumática en la misma medida que una herida o quemadura, por lo cual siempre es dolorosa. Necesita un tiempo y un proceso para volver al equilibrio normal que es lo que constituye el duelo>>.
Momentos iniciales
Todos nosotros, en algún momento de nuestra vida, experimentaremos la pérdida de un ser querido. El duelo, o proceso de recuperación, es un periodo único, y cada persona lo vive de una manera distinta. Al comienzo es normal sentir confusión, incredulidad, consternación; también es posible que niegues la muerte. Los primeros días y semanas puedes sentirte como anestesiado, o con sentimientos de irrealidad: es muy difícil aceptar lo que ha sucedido. Puedes creer que has visto a la persona y estar esperando su regreso. También a veces puedes sentirte desequilibrado, con fuertes altibajos.
Algunos expertos sugieren que esta primera fase tienen una función protectora, que nos permite, desde esta sensación de irrealidad, hacer frente a lo mucho que hay que hacer en estos momentos: ocuparse del funeral, atender a las visitas, organizar los papeles, ocuparse de los mayores y de los niños.
A pesar de lo que pueda parecerte, NO TE ESTÁS VOLVIENDO LOCO.
Lo que estás viviendo es absolutamente normal y es importante vivirlo.
Síntomas físicos y emocionales
Poco a poco, a medida que pasan las semanas la realidad va emergiendo, la pérdida se hace más presente y podemos sentirnos tristes, desesperanzados, solos, culpables, muy enfadados o todo a la vez.
El dolor también se vive físicamente: sentimos un vacío en el estómago, un nudo en la garganta, ardor en el abdomen, el corazón partido. Todas estas sensaciones son absolutamente normales También es normal que no podamos concentrarnos en nada, que seamos incapaces de leer el periódico, que cualquier noticia nos intensifique el dolor. A pesar de todos estos síntomas es importante recordar que el duelo no es una enfermedad, y que si experimentamos esas sensaciones es porque estamos vivos, somos humanos y hemos amado. No sentir dolor es una forma de duelo complicado.
Recuerda que es importante descansar, dormir y comer bien.
Haz ejercicio regularmente: el deporte es el mejor antidepresivo natural
FALSAS CREENCIAS EN EL DUELO
LO QUE NO TE AYUDARÁ si estás en duelo es creer que:
- si hablas de tus sentimientos te encontrarás peor,
- hacerse el fuerte y disimular es bueno,
- nadie te puede ayudar o que nadie sabe cómo te sientes,
- lo mejor es controlar tus emociones y hacer como si no te pasara nada
- lo tuyo es lo peor o, al contrario, que no es nada….