Jueves, 29 de diciembre de 2016
Consult Psicologia Clinica MDS
- Las Terrenas, Samaná, (República Dominicana)
Psicología
Psicología
Para Greenberg & Goldman (2008) la validación en las relaciones de pareja, permite comunicar al otro que su experiencia o respuesta tiene sentido y que es comprensible. El solo hecho de que su pareja esté sintiendo una preocupación por alguna situación particular es suficiente para mostrar comprensión y apoyo incondicional. La validación supone aceptar y respetar al otro y comunicarle esta comprensión demostrando una real valoración de los sentimientos de su pareja. La validación contiene aspectos claves que promueven una relación de pareja más satisfactoria y plena.
Por el contrario, cuando uno o ambos miembros de la pareja se siente invalidado, percibe una falta de apoyo, se siente juzgado y criticado constantemente. Muchas veces al expresar un sentimiento o preocupación, la persona no necesariamente desea un consejo o que se le proporcionen soluciones. Con una mirada o un gesto compasivo, la persona recibe el apoyo que necesita y el hecho de que se la escuche es suficiente para que se sienta mejor, porque su pareja ha facilitado su expresión emocional. Ejemplos de invalidación serían parecidos a las situaciones que se describen a continuación:
Ignorar: La pareja ignora la experiencia interna del otro. No escucha lo que la otra persona le está diciendo o no reconoce que el otro está experimentando algo.
Crítica: El compañero critica la experiencia interna, las acciones o la identidad del otro, mostrando una falta de aceptación. La manera o el contenido son desdeñosos, críticos o tienden a tratar de empequeñecer a la otra persona, como restando importancia: “estás equivocada, eres estúpido, no sabes de qué estás hablando!!”
Definición dominante: El esposo o la esposa define la realidad de su compañero de una manera autoritaria, explicando la experiencia o conducta del otro en forma negativa o controladora y no reconoce o no encaja con la visión o experiencia de la otra persona. Esto descalifica al otro y transmite una actitud paternalista, diciendo que su experiencia está equivocada y que no debe estar sintiéndose así. Un ejemplo de esto sería algo como “no tienes razón para llorar, es tonto”
Mala interpretación: El entendimiento que es transmitido es inexacto o solamente capta el aspecto más obvio y un miembro de la pareja puede mal interpretar lo que el otro está diciendo. No reconoce el significado de la experiencia de su pareja y puede no darse cuenta o no reconocer lo que le está ocurriendo.
La comunicación es vital para una relación plena, pero además deben estar presentes los sentimientos de validación, confianza y apoyo emocional. Bajo este modelo se fortalecen la autoestima y el sentido del yo de cada miembro de la pareja y les ayuda a entender que en la diferencia y en la diversidad que aporta cada uno se encuentra el valor de la relación, lo que despierta una curiosidad sana en descubrir el mundo emocional de cada uno fortaleciéndose además los lazos de amor y de vínculo entre ellos.
Maritza Díaz Savary
Psicóloga Clínica
Especialista en Terapias de Última Generación (ACT y Mindfulness)
Tels. (809) 508-7632 y (829) 994-6119
Por el contrario, cuando uno o ambos miembros de la pareja se siente invalidado, percibe una falta de apoyo, se siente juzgado y criticado constantemente. Muchas veces al expresar un sentimiento o preocupación, la persona no necesariamente desea un consejo o que se le proporcionen soluciones. Con una mirada o un gesto compasivo, la persona recibe el apoyo que necesita y el hecho de que se la escuche es suficiente para que se sienta mejor, porque su pareja ha facilitado su expresión emocional. Ejemplos de invalidación serían parecidos a las situaciones que se describen a continuación:
Ignorar: La pareja ignora la experiencia interna del otro. No escucha lo que la otra persona le está diciendo o no reconoce que el otro está experimentando algo.
Crítica: El compañero critica la experiencia interna, las acciones o la identidad del otro, mostrando una falta de aceptación. La manera o el contenido son desdeñosos, críticos o tienden a tratar de empequeñecer a la otra persona, como restando importancia: “estás equivocada, eres estúpido, no sabes de qué estás hablando!!”
Definición dominante: El esposo o la esposa define la realidad de su compañero de una manera autoritaria, explicando la experiencia o conducta del otro en forma negativa o controladora y no reconoce o no encaja con la visión o experiencia de la otra persona. Esto descalifica al otro y transmite una actitud paternalista, diciendo que su experiencia está equivocada y que no debe estar sintiéndose así. Un ejemplo de esto sería algo como “no tienes razón para llorar, es tonto”
Mala interpretación: El entendimiento que es transmitido es inexacto o solamente capta el aspecto más obvio y un miembro de la pareja puede mal interpretar lo que el otro está diciendo. No reconoce el significado de la experiencia de su pareja y puede no darse cuenta o no reconocer lo que le está ocurriendo.
La comunicación es vital para una relación plena, pero además deben estar presentes los sentimientos de validación, confianza y apoyo emocional. Bajo este modelo se fortalecen la autoestima y el sentido del yo de cada miembro de la pareja y les ayuda a entender que en la diferencia y en la diversidad que aporta cada uno se encuentra el valor de la relación, lo que despierta una curiosidad sana en descubrir el mundo emocional de cada uno fortaleciéndose además los lazos de amor y de vínculo entre ellos.
Maritza Díaz Savary
Psicóloga Clínica
Especialista en Terapias de Última Generación (ACT y Mindfulness)
Tels. (809) 508-7632 y (829) 994-6119