Miércoles, 23 de abril de 2014
Gregorio Romero. Psicologo ACT
- Barcelona, (España)
Psicología
Psicología
Estrés y burnout.
El estrés es una respuesta adaptativa, normal y necesaria que nuestro organismo pone en marcha ante situaciones que requieren un esfuerzo extra. Se da tanto en situaciones de bonanza económica como en situaciones de crisis económica. La diferencia es que en situaciones de crisis los niveles de estrés y burnaut son más altos. Empleados y profesionales asumen más responsabilidades, trabajan más horas, más presión, más volumen de trabajo y a cambio, reducción de salario, menos beneficios sociales y menos bajas laborales con tal de mantener el puesto de trabajo o la renovación del trabajo temporal. Sobre un 25% de la población laboral europea padece síntomas relacionados con el estrés, el burnout, fatiga mental, ocasionados por las condiciones laborales y psicosociales. Se prevé que estos problemas sigan aumentando en los próximos años. Suponen un gran coste social y laboral. A grandes rasgos podemos decir que los estresores vinculados directamente a la crisis económica se están manteniendo en el tiempo con lo que la respuesta de estrés implícita hace mella en la salud física y psicológica, es decir, ante la presencia de una respuesta prolongada de estrés también aumentan los casos de agotamiento psicológico o burnout, sobre todo en profesiones que exigen mayor trato personal e implicación emocional: médicos, enfermeras, terapeutas, profesores, asistentes sociales, policías, ect. Los síntomas característicos del burnout son: angustia, pérdida del control, hostilidad y rechazo del trabajo, confusión, sensación de impotencia y fracaso, desmotivación, trastornos psicosomáticos e insomnio.
Señalar que el grado de estrés no solo depende del individuo, en la medida de la posible habría que rediseñar una defectuosa organización del trabajo y/o las formas de trabajar que inciden negativamente en la salud del trabajador o profesional. Una vez realizadas las posibles modificaciones del ambiente, el tratamiento psicológico se centrará en cómo afrontar los agentes estresores dadas las circunstancias vigentes.
Tanto a nivel individual como a nivel grupal, la Terapia de Aceptación de Compromiso (ACT) presenta un modelo de afrontamiento efectivo para abordar problemáticas relacionadas con el estrés y el burnout. En los últimos años han aparecido varias publicaciones, artículos y estudios que avalan las aplicaciones de ACT en el estrés relacionado con el trabajo. Dichos estudios se centran en trabajadores en general o en profesiones concretas, por ejemplo, enfermeras, maestros, estudiantes, médicos, trabajadores sociales, terapeutas, etc.
El objetivo de la intervención es alterar la relación del cliente con los síntomas y creencias asociadas al estrés/burnout. No se centra en eliminar o reducir directamente esos síntomas ni tampoco se van a cuestionar las creencias. Se busca que el cliente sea capaz de actuar de forma efectiva y con flexibilidad incluso en presencia de los eventos privados aversivos. Es decir, el objetivo de las intervencion ACT no es eliminar la experiencia de estrés, sino cambiar la relación de la persona con la experiencia del estrés, estar dispuesto a experimentar y al mismo tiempo promover un comportamiento coherente con los valores propios, vivir de acuerdo a los valores personales a pesar de las posibles barreras que puedan surgir.
En los siguientes artículos se profundiza en el tema planteado y se proponen una serie de protocolos de intervención de unas 12 sesiones individuales de 1 hora o 6 sesiones grupales de 2 horas. El tratamiento incluye varios procedimientos y ejercicios, por ejemplo, psico-educación, ejercicios experienciales, mindfullnes, metáforas, discusiones en grupo, ejercicios dirigidos a tomar distancia de las emociones y/o pensamientos no deseados, clarificación de valores, promover acciones en dirección a valores, juegos de rol, práctica diaria, etc.
Para saber más;
Bond, F., (2004). ACT for stress. A Practical Guide to ACT. Hayes & Strohsahl (Eds).
Dahl, J., Wilson, K. G., & Nilsson, A. (2004). Acceptance and Commitment Therapy and the treatment of persons at risk for long-term disability resulting from stress and pain symptoms: A preliminary randomized trial. Behavior Therapy, 35, 785-802.
Brinkborg, H., Michanek, J., Hesser, H. & Berglund, G. (2011). Acceptance and Commitment Therapy for the treatment of stress among social workers: A randomized controlled trial. Behaviour Research and Therapy, 49, 389-398.
Flaxman, P. E., & Bond, F. W. (2010). A randomised worksite comparison of acceptance and commitment therapy and stress inoculation training. Behavior Research and Therapy, 48, 816-82
El estrés es una respuesta adaptativa, normal y necesaria que nuestro organismo pone en marcha ante situaciones que requieren un esfuerzo extra. Se da tanto en situaciones de bonanza económica como en situaciones de crisis económica. La diferencia es que en situaciones de crisis los niveles de estrés y burnaut son más altos. Empleados y profesionales asumen más responsabilidades, trabajan más horas, más presión, más volumen de trabajo y a cambio, reducción de salario, menos beneficios sociales y menos bajas laborales con tal de mantener el puesto de trabajo o la renovación del trabajo temporal. Sobre un 25% de la población laboral europea padece síntomas relacionados con el estrés, el burnout, fatiga mental, ocasionados por las condiciones laborales y psicosociales. Se prevé que estos problemas sigan aumentando en los próximos años. Suponen un gran coste social y laboral. A grandes rasgos podemos decir que los estresores vinculados directamente a la crisis económica se están manteniendo en el tiempo con lo que la respuesta de estrés implícita hace mella en la salud física y psicológica, es decir, ante la presencia de una respuesta prolongada de estrés también aumentan los casos de agotamiento psicológico o burnout, sobre todo en profesiones que exigen mayor trato personal e implicación emocional: médicos, enfermeras, terapeutas, profesores, asistentes sociales, policías, ect. Los síntomas característicos del burnout son: angustia, pérdida del control, hostilidad y rechazo del trabajo, confusión, sensación de impotencia y fracaso, desmotivación, trastornos psicosomáticos e insomnio.
Señalar que el grado de estrés no solo depende del individuo, en la medida de la posible habría que rediseñar una defectuosa organización del trabajo y/o las formas de trabajar que inciden negativamente en la salud del trabajador o profesional. Una vez realizadas las posibles modificaciones del ambiente, el tratamiento psicológico se centrará en cómo afrontar los agentes estresores dadas las circunstancias vigentes.
Tanto a nivel individual como a nivel grupal, la Terapia de Aceptación de Compromiso (ACT) presenta un modelo de afrontamiento efectivo para abordar problemáticas relacionadas con el estrés y el burnout. En los últimos años han aparecido varias publicaciones, artículos y estudios que avalan las aplicaciones de ACT en el estrés relacionado con el trabajo. Dichos estudios se centran en trabajadores en general o en profesiones concretas, por ejemplo, enfermeras, maestros, estudiantes, médicos, trabajadores sociales, terapeutas, etc.
El objetivo de la intervención es alterar la relación del cliente con los síntomas y creencias asociadas al estrés/burnout. No se centra en eliminar o reducir directamente esos síntomas ni tampoco se van a cuestionar las creencias. Se busca que el cliente sea capaz de actuar de forma efectiva y con flexibilidad incluso en presencia de los eventos privados aversivos. Es decir, el objetivo de las intervencion ACT no es eliminar la experiencia de estrés, sino cambiar la relación de la persona con la experiencia del estrés, estar dispuesto a experimentar y al mismo tiempo promover un comportamiento coherente con los valores propios, vivir de acuerdo a los valores personales a pesar de las posibles barreras que puedan surgir.
En los siguientes artículos se profundiza en el tema planteado y se proponen una serie de protocolos de intervención de unas 12 sesiones individuales de 1 hora o 6 sesiones grupales de 2 horas. El tratamiento incluye varios procedimientos y ejercicios, por ejemplo, psico-educación, ejercicios experienciales, mindfullnes, metáforas, discusiones en grupo, ejercicios dirigidos a tomar distancia de las emociones y/o pensamientos no deseados, clarificación de valores, promover acciones en dirección a valores, juegos de rol, práctica diaria, etc.
Para saber más;
Bond, F., (2004). ACT for stress. A Practical Guide to ACT. Hayes & Strohsahl (Eds).
Dahl, J., Wilson, K. G., & Nilsson, A. (2004). Acceptance and Commitment Therapy and the treatment of persons at risk for long-term disability resulting from stress and pain symptoms: A preliminary randomized trial. Behavior Therapy, 35, 785-802.
Brinkborg, H., Michanek, J., Hesser, H. & Berglund, G. (2011). Acceptance and Commitment Therapy for the treatment of stress among social workers: A randomized controlled trial. Behaviour Research and Therapy, 49, 389-398.
Flaxman, P. E., & Bond, F. W. (2010). A randomised worksite comparison of acceptance and commitment therapy and stress inoculation training. Behavior Research and Therapy, 48, 816-82