Lunes, 14 de mayo de 2018
Psicologa Vanessa Dominguez
- Atizapan, (México)
Psicología Terapias Ansiedad
Psicología Terapias Ansiedad
La ansiedad es una manera de vivir, protege de los peligros, preserva la vida y hace que nos demos cuenta de las cosas negativas que es posible cambiar. Pero es indispensable que se trate de una ansiedad sana, es decir, asociada a una actitud de inquietud, precaución y vigilancia.
La ansiedad malsana, en cambio, es muy distinta. Conduce a un pánico paralizador, a preocupaciones obsesivas y a fobias que nos impiden realizar ciertas cosas por considerarlas peligrosas, cuando en realidad no lo son. La ansiedad malsana inhibe nuestra capacidad para disfrutar de las actividades cotidianas y de las relaciones, haciendo que las veamos como demasiado arriesgadas. Afortunadamente, siguiendo el enfoque de la Terapia Racional Emotivo-Conductual (TREC), usted podrá controlar la ansiedad antes de que ésta le controle a usted, puesto que son sus expectativas poco realistas las que le provocan una ansiedad innecesaria.
Enseñando al paciente como funcionamos por medio del pensamiento, ayudándole a identificar que pensamientos irracionales le están provocando sentirse ansioso, que tipo de experiencias ha tenido que quizá detonaron la ansiedad, en qué tipo de situaciones, momentos y más.
Ayudar al paciente a reconocer tales ideas irracionales como hipótesis y no como hechos, lograr que desechen los pensamientos que los trastornan a fin de que se sientan mucho mejor y ayudarlos a que no continúen teniendo en el futuro esas ideas irracionales.
La manera en que interpretamos lo que nos sucede, el significado que le damos, la manera en que pensamos de esas situaciones, personas, momentos, etc, nos provoca una emoción, preocupación excesiva, miedo, ansiedad, nos sentimos más que incomodos, nos paralizamos, por supuesto se tienen malestares físicos, por ende la conducta será ansiosa y paralizante.
Desbloqueando y reestructurando los pensamientos que provocan la ansiedad, se tendrán emociones de tranquilidad, de autocontrol en momentos estresantes, una conducta favorable, productiva, con ímpetu y energía para realizar las cosas que le gustan, disfrutar de manera funcional, disfrutar su vida, vivir conscientemente cada momento, el presente.
En terapia se trata el conflicto de ansiedad de acuerdo a la necesidad de cada persona, analizando el porqué, enfocándonos a la solución y sanación; enseñando nuevas herramientas (Manejo del pensamiento, emociones, conductas, técnicas del pensamiento, técnicas de relajación, visualizaciones, etc) para trabajar en terapia y lo más importante, para aplicarlas de por vida.
El espacio de terapia psicológica, es de escucha, algo esencial, pues todos los seres humanos necesitamos expresarnos y sentirnos escuchados, es parte de la sanación. El espacio de terapia también es para aprender, para darle un enfoque constructivo, sano a nuestra vida.
La ansiedad malsana, en cambio, es muy distinta. Conduce a un pánico paralizador, a preocupaciones obsesivas y a fobias que nos impiden realizar ciertas cosas por considerarlas peligrosas, cuando en realidad no lo son. La ansiedad malsana inhibe nuestra capacidad para disfrutar de las actividades cotidianas y de las relaciones, haciendo que las veamos como demasiado arriesgadas. Afortunadamente, siguiendo el enfoque de la Terapia Racional Emotivo-Conductual (TREC), usted podrá controlar la ansiedad antes de que ésta le controle a usted, puesto que son sus expectativas poco realistas las que le provocan una ansiedad innecesaria.
Como tratar el trastorno de Ansiedad con Terapia Racional Emotivo Conductual
Enseñando al paciente como funcionamos por medio del pensamiento, ayudándole a identificar que pensamientos irracionales le están provocando sentirse ansioso, que tipo de experiencias ha tenido que quizá detonaron la ansiedad, en qué tipo de situaciones, momentos y más.
Ayudar al paciente a reconocer tales ideas irracionales como hipótesis y no como hechos, lograr que desechen los pensamientos que los trastornan a fin de que se sientan mucho mejor y ayudarlos a que no continúen teniendo en el futuro esas ideas irracionales.
La manera en que interpretamos lo que nos sucede, el significado que le damos, la manera en que pensamos de esas situaciones, personas, momentos, etc, nos provoca una emoción, preocupación excesiva, miedo, ansiedad, nos sentimos más que incomodos, nos paralizamos, por supuesto se tienen malestares físicos, por ende la conducta será ansiosa y paralizante.
Desbloqueando y reestructurando los pensamientos que provocan la ansiedad, se tendrán emociones de tranquilidad, de autocontrol en momentos estresantes, una conducta favorable, productiva, con ímpetu y energía para realizar las cosas que le gustan, disfrutar de manera funcional, disfrutar su vida, vivir conscientemente cada momento, el presente.
En terapia se trata el conflicto de ansiedad de acuerdo a la necesidad de cada persona, analizando el porqué, enfocándonos a la solución y sanación; enseñando nuevas herramientas (Manejo del pensamiento, emociones, conductas, técnicas del pensamiento, técnicas de relajación, visualizaciones, etc) para trabajar en terapia y lo más importante, para aplicarlas de por vida.
El espacio de terapia psicológica, es de escucha, algo esencial, pues todos los seres humanos necesitamos expresarnos y sentirnos escuchados, es parte de la sanación. El espacio de terapia también es para aprender, para darle un enfoque constructivo, sano a nuestra vida.